miércoles, 25 de marzo de 2015

Por un Amor sin sombras






Cuando un amor deja sombras hay un corazón herido, y cuando hay un corazón herido, es muy difícil amar. El corazón está hecho para amar, pero para amar bien y tratarnos bien. El amor me lleva al encuentro con la persona desde el reconocimiento. Pues yo soy amor en el reconocimiento del otro. Es por eso que el amor es más que un sentimiento, es más que algo sensible que siento en mi interior. Radica fundamentalmente en un compromiso, en una actitud para salir de sí mismo al encuentro con el otro. Es verdaderamente en ese encuentro donde la persona puede sentirse acogida, sostenida, reconocida y valorada. Pues el amor que busca el propio interés corre el peligro de irse cerrando en sí mismo. Esto es lo que le sucede a aquel caballero que nos describe Robert Fisher en su libro titulado el caballero de la armadura oxidada: un hombre que vive para sí mismo, colocándose una armadura porque tiene un interior roto por sentimientos de dolor, culpa y rencor. Cuando estas sombras nos persiguen, es difícil abrirnos al amor, porque lo natural tendencia del ser humano es huir de lo que le produce dolor. Sin embargo el mayor dolor se lo produce aquel que no ha sanado y amado su propia historia para así amar a los demás.

A veces es tal la desconexión que hacemos con nosotros mismos, que se torna fácil el ir cubriendo nuestras heridas emocionales con un caparazón tal que es difícil procurar nuestra propia integración. ¿Y si nosotros vivimos desconectados de nosotros mismos, como ir al encuentro del otro? Difícil ¿verdad? En este espacio en el que os escribo precisamente entorno a la solidaridad y la acción social, es premisa básica partir de un salir de sí mismo para ir al encuentro con el otro, y para que juntos podamos sembrar y construir un mundo siempre mucho mejor. Pues bien dediquémonos a amar, pero amar bien por favor, sin sombras que nos cubran y con más gratuidad, generosidad, y compromiso en donde se dignifique la vida y la dignidad de cada persona, ¡hagámoslo posible para llevarlo cabo!



Mª Del Carmen González Rivas. Psicóloga

Centro de Atención Psicológico y Familiar Vínculos

www.psicovinculos.es